¿Ha notado dificultades en el aprendizaje de su hijo? Ha detectado signos que no engañan. Está trabajando, pero sus notas son desastrosas... ¿Parece desmotivado? ¿Está abrumado? ¿Te dices a ti mismo que lo has intentado todo, pero nada funciona? Tal vez podrías usar un entrenador escolar.
¿Por qué necesitaríamos un entrenador escolar? ¿Por qué necesitaríamos un entrenador escolar?
Un entrenador escolar es un acompañamiento para su hijo. Lo convertirá en un actor de su propio éxito. Este método permite fijar objetivos para sus estudios y su futuro. También ofrece la oportunidad de mejorar la autonomía del estudiante optimizando su aprendizaje. Las causas del fracaso académico son numerosas, como el estrés, la timidez o los problemas personales que bloquean su trabajo en la escuela. El consejero pondrá entonces en marcha apoyos no disciplinarios para ayudar al estudiante. El entrenamiento escolar sería la solución a estos problemas, que los padres describiríamos como menores, pero que abruman a nuestros queridos!
La estrategia del entrenador escolar
¿Cómo encuentro a mi entrenador escolar? Los especialistas del tema le aconsejarán que realice una búsqueda en Internet. Cuando haya encontrado el adecuado, le propondrá hacer un diagnóstico para situar a su hijo en su entorno escolar y familiar. Luego, dependiendo del resultado, optará por varios métodos y soluciones adecuadas a las dificultades. Propondrá reuniones de entrenamiento individual o talleres grupales para que el estudiante aprenda a aprender, maneje su estrés o tenga éxito en el debate de los temas. Una cosa lleva a la otra, las sesiones darán sus frutos. El profesional tiene varios enfoques y métodos para resolver un caso como la PNL (Programación Neuro-Lingüística) actuando sobre el comportamiento del niño.
Elegir un entrenador escolar
Tómese su tiempo para hacer su selección. Intente encontrar al profesional que acompañará a su hijo en sus estudios basándose en su reputación y experiencia. Por lo tanto, puede, sin temor, confiar su hijo a un profesional que lo apoye con métodos de trabajo específicos para el caso de su hijo. Opte por un paciente acompañante que procederá paso a paso para obtener resultados tangibles. El entrenador profesional tendrá que demostrar que ha seguido la formación necesaria para ejercer su profesión. Tenga en cuenta que no son sesiones de entrenamiento de tres días. Por supuesto, usted permanecerá en contacto con esta persona por correo electrónico o por teléfono para seguir de cerca la evolución de su hijo.